Los Jardines de Zoraya, restaurante flamenco. Este es un detalle a tener muy en cuenta, porque afecta decisivamente en la experiencia que puedes tener allí. En los Jardines de Zoraya se cena durante el espectáculo, por lo que el servicio, pese a ser profesionales e intentar molestar lo menos posible, ha de pasar justo delante del escenario de manera continua con las molestias que esto genera en el espectador.
Pese a esto, nuestra atención se quiere centrar en el espectáculo porque los artistas en escena merecen la pena.
Da comienzo un poco después de lo previsto -los cinco minutos de cortesía- y lo hace por bulerías, que sirven como presentación.
Sobre el escenario de Los Jardines de Zoraya estaba una pareja de baile; él, Javier Martos, muy técnico y enérgico, ella, Conchi Maya, demostró su profesionalidad y flamencura bailando con enjundia y estilo, pese a estar notablemente enferma -con una tos que le acompañó todo el tiempo-. El guitarrista, El Pirata, estuvo pendiente del cante y del baile en todo momento y nos dejó una bonita granaína, a pesar de lo mal que estaba ecualizado su micrófono.
De los cantaores, Antonio Gómez el Turry y Sergio Gómez el Colorao, destacamos su frescura y energía, sus ganas y entusiasmo, su pasión y afición al flamenco. Esa que nos transmitieron en cada cante o que se notaba cuando se cantiñeaban entre ellos las siguientes coplas que iban a hacer. Se les veía disfrutar y eso es siempre de agradecer.
Resulta llamativo que durante el solo de guitarra se colaban desde fuera de la sala las voces del resto de compañeros y personal de la sala, siendo molesto para los espectadores y -suponemos- que también para el propio guitarrista.
En definitiva un cuadro muy digno del que no pudimos disfrutar tanto como nos hubiese gustado, ya que entre el paso de los camareros, las salidas y entradas de los clientes durante el pase y ese molesto ruido que, a veces, se colaba a la sala desde la barra, la verdad se hacía complicado dejarse llevar por el espectáculo y disfrutar.
Destacar que cuentan con un sistema de evaluación que pasan a los clientes una vez terminado el pase, esperemos que tengan en cuenta las opiniones y cambien algunos de los detalles que no ayudan a crear una experiencia mejor.