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Café de Chinitas, un cuadro de los que no quedan

De tablao en tablao

Café de Chinitas
Ene 31 2017

Café de Chinitas, un cuadro de los que no quedan

Cuando pensamos en el tablao el Café de Chinitas se nos viene a la cabeza nombres tan fundamentales para la historia flamenca como La Chunga, Serranito, José Mercé, Carmen Linares o María Vargas, sólo por citar algunos de los que contribuyeron a convertir al Café Chinitas en uno de los espacios más flamencos del Madrid de los años 70 y 80 del pasado siglo.

Al entrar por sus puertas percibimos el paso de la historia desde la entrada –con su glamurosa escalera- hasta el fondo del tablao –repleto de mantones de manila-. Por sus paredes cuelgan fotografías de algunos de los artistas flamencos más reconocibles del último medio siglo y, también, cuadros con motivos taurinos.

Con puntualidad británica, a las 20:30 horas, da comienzo el cuadro con el famoso “Café de Chinitas” de Federico García Lorca. Tras esto, que sirve como presentación, hubo un solo de toque y, a continuación, empiezan a sucederse los bailes por alegrías, tangos y bulerías, para cerrar por sevillanas con palillos.

Este es el formato del que la dirección hace bandera a juzgar por su programación y por las palabras de su responsable, quien argumenta que ya no hay un cuadro igual en Madrid, un cuadro al estilo clásico… un cuadro de los que no quedan, y que sería una verdadera pena perder este formato.

A nuestro entender, la opción escogida por la dirección puede ser correcta, siempre teniendo en cuenta que, a veces, por la necesidad de hacer siempre más o menos lo mismo el artista pueda perder la motivación.

La desmotivación artística puede dar respuesta a lo que -por momentos- se vio sobre el escenario, donde buenos artistas cantaban, bailaban y tocaban casi de memoria, con aire apático pero con mucho oficio, con sensación de rutina… y es que no es fácil, somos conscientes.

De sus programaciones podemos ver que confía en los artistas jóvenes, cuestión a tener muy en cuenta y valorar positivamente. Pero para que esta medida sea tan buena como se prevé, quizá les haga falta estimular aún más los talentos de esos jóvenes, servir de acicate en su formación, exigirles que aprendan cada día, darles apoyo en su formación…

Por su historia y por las palabras de sus responsables, esperamos que pongan atención en esos detalles y más pronto que tarde el Café de Chinitas vuelva ser un tablao de referencia.

Fecha de las visitas: 20 de octubre de 2016 con periodista acreditado y 3 de noviembre –sin previo aviso-.

Descubre cómo fue la visita para los amigos de Deflamenco.com

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